El patio del colegio público de Primaria Santa María, en Vitoria, parece la Torre de Babel. Es un reflejo de lo que se vive en sus aulas. De los 160 estudiantes que tiene el centro, el 90% son inmigrantes. La mezcla de orígenes y culturas alcanza el cénit en una clase de quinto de Primaria.
El colegio concertado religioso Hogar San José, en San Sebastián, es el ejemplo de que los centros concertados también pueden asumir una mayor carga de alumnos inmigrantes. De los 192 estudiantes matriculados, el 62% es inmigrante. La directora, Begoña Jáuregui, apunta que los resultados académicos de los alumnos son "perfectamente equiparables" a los de cualquier otro colegio.
1 comentario:
Me gusta el post porque hacer corresponsables o pedir que en los centro concertados tengan las mismas obligaciones que los públicos es muy legítimo, y otra diferente tratar el tema con afirmaciones discriminatorias hacia el colectivo o unida a términos como fracaso, problema etc. que inconscientemente se hace.
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